Que pasa cuando tomamos un exceso de Proteínas de
origen animal como habito diario? que nuestro organismo las transforma en Grasas Saturadas y se
almacenan como reservas pero no sólo afectara en nuestro peso o volumen sino
que tiene efectos negativos en nuestro sistema linfático y venoso.
Que pasa cuando fumamos, que degradamos entre otros
nuestro sistema capilar.
Una de los partes de nuestro cuerpo que se ven afectadas rápidamente, en ambos casos, son nuestros capilares de las extremidades, son los finales de venas que riegan
las partes extremas y estas mini válvulas se van afectando y dejan de realizar
su función correctamente.
Estas mini válvulas son como unos mini corazones
que favorecen la entrada de elementos alimentarios para las células de estas
zonas (nutrientes) y permiten la eliminación de los tóxicos resultantes de las
diferentes reacciones químicas que realizan las células (residuos) y que son
expulsados a través de nuestro sistema linfático.
Cuando estos procesos dejan de funcionar
correctamente nuestro organismo nos da las primeras señales en forma de aviso:
- Acumulación de grasas concentradas en zonas; celulitis ( encapsulamiento de tóxinas que nuestro organismo retiene y controla depositandolas en zonas de menor riesgo que si estuvieran en sangre o otros lugares venas, arterias...)
- Retención de líquidos
- Falta de regeneración de tejidos internos y falta de nutrientes en
estas células
- Problemas de circulación en extremidades manos y pies, suelen tender
ha estar fríos al principio hasta llegar a perder la sensibilidad y el
tacto
- Perdida de rapidez mental, de memoria, hasta llegar a enfermedades
mentales más graves.
- etc ...
Para revertir este proceso debemos de incrementar el consumo de frutos, verduras, y de cereales integrales.
Eliminar la ingesta de azucares y harinas refinadas (fuente también de grasas saturadas), de alimentos procesados y en conservas, reducir la ingesta de proteína animal en especial las carnes rojas, la leche y los quesos curados, mantequillas, natas, margarinas...
Cocinar los alimentos al vapor, plancha o horno, y eliminar los fritos, rebozados y salsas procesadas.
Realizar ejercicio diario y tomar abundante agua.
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